DEJAR LOS LÁCTEOS TAMBIÉN PUEDE SALVAR AL PLANETA, APRENDE A PREPARAR “LECHES” VEGETALES ECONÓMICAS.


Desde pequeños nos han dicho que beber leche nos hace más sanos y con huesos fuertes, pero la realidad es que la leche de vaca no está diseñada para el consumo humano. La leche de vaca está hecha para satisfacer las necesidades de los terneros, que tienen cuatro estómagos, duplican su peso en 47 días y llegan a los 362 kg. en menos de un año. Los productos lácteos están relacionados con problemas cardíacos, cáncer, obesidad, diabetes y osteoporosis, lo que los hace un alimento alejado de proporcionar buena salud.

Las vacas de la industria láctea son esclavizadas toda su vida, son sometidas a embarazos forzados, privación de libertad, ordeña intensiva y medicación. Las crías de estas son separadas de sus madres al nacer, para que la leche que naturalmente le corresponde a los terneros, sea comercializada. Una vez el ternero nace y es retirado de la madre esta empieza a ser ordeñada y seguirá produciendo leche durante unos diez meses, y antes de que deje de dar leche volverá a ser inseminada otra vez y el proceso continuará así durante toda la vida de la vaca. Las vacas víctimas de la explotación intensiva no viven más allá de 5 o 6 años, cuando su ciclo de vida debería alcanzar los 20 años.

DEJAR LOS LÁCTEOS TAMBIÉN PUEDE SALVAR AL PLANETA

Además, la leche envasada tiene un gran impacto negativo en el medio ambiente, que comienza desde la producción de piensos que se darán a los animales. Para obtener un litro de leche se necesita alrededor de un kilo de pienso para alimentar las vacas lecheras. Estos piensos, que combinan cereales y soja principalmente, son en su mayoría productos agrícolas que han tenido que ser cultivados, secados y transportados. Tanto el uso de fertilizantes y pesticidas, como la quema y el consumo de combustibles fósiles necesarios durante las labores de campo y el transporte de las materias, producen un impacto ambiental e influyen en el cambio climático. También aumentan la toxicidad del suelo y el agotamiento de recursos, entre otras cosas.

La granja para la explotación lechera necesita realizar las tareas de ordeño y limpieza de instalaciones, así como gestionar el estiércol producido por las vacas, por lo que las aguas también quedan contaminadas. Los gases de metano debidos a la propia digestión del ganado también contribuyen al cambio climático. Según el Panel Internacional de Cambio Climático, para producir 7.000 litros de leche, una vaca puede llegar a emitir 140 kilos de metano al año, emisiones equivalentes a recorrer 8.000 kilómetros en coche.

DEJAR LOS LÁCTEOS TAMBIÉN PUEDE SALVAR AL PLANETA

En 2017 la Profepa detectó 22,842.55 toneladas de sustancias contaminantes lanzadas al río Temascatío por la planta de Lala Derivados Lácteos.

Afortunadamente existen sustitutos para este alimento al que estamos tan acostumbrados, que son deliciosos, libres de químicos, tortura, e ingredientes desconocidos, los puedes hacer a tu gusto, usar en tu cereal, licuados, café, o en cualquier receta y además son sanos y muy baratos. Hoy te voy a enseñar cómo realizar deliciosas leches vegetales con muy pocos ingredientes, desde la comodidad de tu hogar.

LECHES VEGETALES FÁCILES Y BARATAS

Leche de arroz

INGREDIENTES:

  • 3 litros de agua
  • 300 gramos de arroz integral (taza y media)
  • Una pizca de sal
  • 2 cucharadas de azúcar (o cualquier otro endulzante, esto es al gusto)
  • 1 cucharada de aceite de coco (es para que sea más cremosa, pero no es indispensable)
  • Puedes añadir canela, vainilla, dátiles o lo que gustes

PROCEDIMIENTO:

  1. Hervir a fuego medio todos los ingredientes en una olla por 30 minutos removiendo de vez en cuando para que no se pegue.
  2. Una vez cocido el arroz, retirar del fuego y dejar enfriar.
  3. Vaciar todo en una licuadora y batir hasta que se deshaga el arroz.
  4. Colar con una tela o con un colador fino, si ves que queda muy espeso puedes agregar más agua hasta que quede a tu gusto.

¡Y listo! Ya tienes tu leche de arroz, la puedes guardar en el refrigerador por 4 días.

LECHES VEGETALES FÁCILES Y BARATAS

Leche de avena

INGREDIENTES:

  • 1/2  Taza de copos de avena enteros o suaves
  • 1 Litro de agua
  • 1 cdita de aceite de coco (opcional)
  • Una pizca de sal
  • Puedes añadir dátiles, azúcar, canela, vainilla o lo que gustes

PROCEDIMIENTO:

  1. Remojar la avena en agua purificada de 4 a 8 horas, reservar en el refrigerador.
  2. Tirar el agua del remojo y vaciar la avena en una olla, junto con el litro de agua y el resto de los ingredientes y cocer de 5 a 8 minutos a fuego medio.
  3. Retirar del fuego y dejar enfriar.
  4. Vaciar todo en una licuadora y batir hasta que se triture la avena.
  5. Colar con una tela o con un colador fino, si ves que queda muy espeso puedes agregar más agua hasta que quede a tu gusto.

Esta leche la puedes conservar de 4 a 5 días en el refrigerador.

LECHES VEGETALES FÁCILES Y BARATAS

Leche de Almendras.

INGREDIENTES:

  • 1 Taza de almendras crudas
  • 1 Litro de agua (más el agua del remojo)
  • Puedes añadir dátiles, azúcar, canela, vainilla o lo que gustes

PROCEDIMIENTO:

  1. Ponemos a remojar las almendras en dos tazas de agua por 10 horas en el refrigerador.
  2. Colamos y tiramos el agua del remojo.
  3. Enjuagamos las almendras con agua pura.
  4. Como paso opcional, pelamos las almendras, para que sea más fácil las puedes remojar en agua hirviendo por 15 minutos.
  5. Licuar las almendras con el litro de agua hasta que estas queden completamente trituradas.
  6. Colar la leche con una tela o algún colador muy fino.

Esta leche la puedes conservar de 3 a 4 días en el refrigerador.

*La pulpa restante que queda después de colar la puedes utilizar para realizar un queso vegano de almendras.

LECHES VEGETALES FÁCILES Y BARATAS

¿Te animas a probar estas deliciosas leches vegetales y unirte al cambio para salvar el planeta?